Varios estudios
demuestran la eficacia de la Jalea Real en todo el organismo, de manera interna
y externa. Se ha comprobado que aumenta y restaura la función hídrica de la
piel, ayudando sobre todo a pieles secas y/o dañadas o pieles con dermatitis
varias.
Es normal que la
Jalea Real aporte numerosos beneficios para la salud, gracias a su fabulosa
composición.
La Jalea Real se
compone de: minerales como el silicio que también favorece la producción
natural de colágeno, calcio, hierro, cobre, magnesio, fósforo, potasio, azufre,
zinc, ácidos grasos esenciales, proteínas, antioxidantes, nutrientes que apoyan
la renovación de la piel tales como flavonoides, ácidos nucleicos, ácido
decanoico, encimas fundamentales, varias vitaminas del grupo B (B1-Tiamina,
B2-Riboflavina, B3-Niacinamide, B5-Pantenol, B6-Piridoxina), Acetil-Colina y
aminoácidos esenciales.
Beneficios para la salud:
-Refuerza el
sistema inmunitario. Es como un antibiótico natural. Mejora la resistencia del
organismo frente a ataques bacterianos, virus y otras infecciones.
-Restaura la
energía y vitalidad en todo el organismo reduciendo el cansancio y la fatiga
crónica.
-Aumenta la
libido.
-Favorece el
crecimiento en niños y adolescentes.
-Aumenta la
capacidad de concentración.
-Equilibra el
sistema nervioso.
-Reduce la
tensión nerviosa y el estrés.
-Trata
depresiones ligeras.
-Aumenta la
memoria.
-Mejora las
funciones cerebrales.
-Mejora la
circulación sanguínea gracias a su acción vasodilatadora evitando así riesgos
de infarto cerebral, trombos, celulitis…etc.
-Promueve y
favorece el sueño reparador.
-Regula la
presión arterial (hipertensión e hipotensión)
-Equilibrante
hormonal. Beneficios tanto para las mujeres menopaúsicas como mujeres en edad
fértil que sufren variaciones hormonales muy intensas. Beneficios hormonales
también para los hombres. Reduce los efectos colaterales negativos de
desequilibrios hormonales en mujeres y hombres.
-Para tratar y
equilibrar pieles con dermatitis, psoriasis, rosácea, cuperosis, eccemas,etc.
-La Jalea Real
tiene propiedades antibacterianas. Limita la proliferación de bacterias que dan
lugar a trastornos dérmicos.
-Reduce el
tinitus (zumbido de oídos).
-Combate
problemas digestivos.
-Reduce el
colesterol malo.
-Mejora
enfermedades respiratorias crónicas.
-Favorece la
curación de bronquitis, amigdalitis, úlceras.
-Refuerza y
fortalece piel, uñas y cabello (espesa y nutre el pelo)
-Combate la
osteoporosis (desmineralización ósea).
-Combate y previene
los herpes labiales.
Beneficios Cosméticos:
El simple gesto
de aplicar el contenido de una perla de Royal Jelly en la piel cada día supone
un refuerzo dérmico con múltiples beneficios en todas las pieles. Al cabo de
una semana ya puede notarse que la piel ha aumentado su hidratación
considerablemente.
-Ideal para usar
en pieles dañadas, pieles muy secas.
-Regenera
tejidos de la piel y promueve el crecimiento de nueva piel más fuerte y sana.
-Aumenta la
producción natural de colágeno tipo I gracias a los ácidos contenidos en la
composición de la Jalea Real.
-Mejora la
firmeza de la piel gracias a la reparación celular y el aumento de la
producción de colágeno que da lugar a una piel más firme y luminosa.
-Iguala el tono
de la piel y evita la formación de manchas.
-Equilibra las
pieles grasas y mejora el acné.
-Retrasa el
envejecimiento sobre todo en pieles menopausicas cuyo envejecimiento se ve más
acelerado por la falta de estrógenos. La Jalea Real, equilibra el tema hormonal
tanto si es tomada como si es usada de forma tópica en cremas, serums o en
perlas aplicadas directamente sobre la piel.
-Evita la
oxidación de las células provocado por los radicales libres, revierte el
proceso oxidativo y otorga mayor resistencia a las células. Demostrado por
varios estudios su eficacia para combatir el daño solar, reparar las células
dañadas y favorecer la renovación de células más sanas y más fuertes.
-Trata pieles
apagadas, estresadas ayudándolas a recuperar la luminosidad.
Contraindicaciones:
-La Jalea Real
está contraindicada en personas alérgicas a productos de las abejas como la
miel, el propóleo o la apitoxina
(picadura de abejas).
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