martes, 25 de marzo de 2014

Cambiando la mirada sobre tu enfermedad


Cuando una enfermedad nos alcanza, comúnmente nos sentimos muy vulnerables frente a ella, especialmente cuando esa enfermedad es de una evolución rápida y con peligro de empeorar sin tener el tiempo suficiente para revertirla. Sin embargo, cualquier tipo de enfermedad puede ser revertida si se atiende el mensaje que trae consigo.

Una enfermedad se manifiesta cuando tenemos un conflicto, que no hemos sido capaces de resolver, con el nivel de conciencia que tenemos en ese momento. O sea, cuando no nos creemos capaces de sobrepasar cierta situación que nos complica la vida. Por ejemplo, cuando no nos sentimos seguros, generamos un estrés que puede crear enojo como medida de defensa, lo que finalmente puede crear una enfermedad al hígado.


Si el nivel de conciencia se elevara, se podría encontrar la solución a ese conflicto y la enfermedad se retiraría. Pero ¿Cómo podemos elevar ese nivel de conciencia? Comprendiendo que somos seres perfectos y magníficos y que todo inconveniente solo es una oportunidad para crecer y ser cada día mejor, sintiéndonos más alineados al amor.


Un conflicto se crea por una falta de entendimiento de la situación que se presenta y al no poder encontrar la verdad sobre ella, el cuerpo físico manifiesta la consecuencia de ese estrés que advertimos por medio de los síntomas de la enfermedad. Este proceso se crea en forma inconsciente. Si nos diéramos cuenta, solo tendríamos el problema y no la enfermedad. La enfermedad es una solución biológica que tiene por finalidad sacar a la luz un conflicto que se encuentra invisible a nuestros ojos. Si fuera visible, solo estaría el problema.


Aún está muy arraigada la necesidad de buscar la solución a la enfermedad en los médicos y en los medicamentos. Estos pueden ayudar, pero la verdadera sanación llega cuando enfocamos la enfermedad en forma correcta preguntando qué podemos aprender por medio de ella.


En la sociedad es poco usual mirar la enfermedad como una oportunidad para ser más feliz. Es necesario un cambio profundo de lo que significa una enfermedad y darse cuenta de qué es lo que debe mejorar en nosotros para acercarnos más a nuestra perfección.

Cuando comprendemos que siempre estamos seguros, vivimos en forma libre y confiada no enfermaremos.

El cuerpo solamente es afectado cuando los otros cuerpos se encuentran en desequilibrio, las emociones, las creencias, los sentimientos y las ideas. La enfermedad se produce cuando algo no está siendo observado con los ojos del entendimiento espiritual, cuando hay un alejamiento o distorsión en las ideas, en las creencias y en las emociones respecto a lo que somos.


Un ser con inteligencia espiritual madura, no requiere enfermar, no tiene conflictos inconscientes, porque se encuentra claro y en la certeza de que todo está bien siempre. Pase lo que pase, sabe que todo está bien y que se encuentra a salvo.


La enfermedad se convierte en un medio que nos puede guiar para llegar a esta madurez espiritual y su mensaje es muy claro. Siempre afecta a los órganos que están involucrados con nuestro desequilibrio interior.


El ser humano tiene la capacidad para escuchar el mensaje de su enfermedad y disponerse a trabajar en él. Para todo aquel que se encuentra en este camino, una enfermedad es una valiosa guía que le ayuda a comprender en qué parte del camino se encuentra y no le teme.


No temer a la enfermedad es un buen síntoma. El solo hecho de temerle es un gran impedimento para avanzar, debido a que todas las energías se vuelcan al rechazo de ella y se desperdician en vez de ser utilizadas para su entendimiento.


Cambiar la mirada sobre tu enfermedad es la puerta que te puede llevar a un nivel donde ya no necesitarás volver a enfermar para seguir tu evolución. En niveles de conciencia más elevados no necesitamos enfermar para crecer, podemos hacerlo en forma consciente y sin la necesidad de sufrimiento, ni dolor físico.


Tu cuerpo ofrece una solución biológica a tu conflicto interno, cuando ni siquiera alcanzas a darte cuenta de que tienes un conflicto que resolver. Cuando la enfermedad se presenta, ya no te queda ninguna duda, se te ha presentado la evidencia perfecta que te demuestra que hay algo por trabajar en tu interior.


A veces la vida te presenta situaciones difíciles, en las áreas de salud, económica y/o relaciones. Sabes que estas situaciones las creas tú, pero hasta la fecha no has podido comprender, como es que las estas creando y no encuentras una salida.

 
¿Te gustaría tener un poco más de conocimiento, sobre los conflictos biológicos y como salir de esa situación?